Domingo 02 de junio. El pacto Unidad para el Cambio, compuesto por el Partido Comunista, Partido Progresista y Federación Regionalista Verde Social, realizó en conjunto el análisis de la cuenta pública de Sebastián Piñera y, a través de sus dirigentes, coincidieron en que “el gran logro de Piñera en 15 meses ha sido estresar a Chile y sigue perdiendo credibilidad”.

Andrea Condemarín, de la directiva del Partido Progresista, indicó que “la cuenta pública evidenció que actualmente en Chile hay una crisis de dos tipos. De credibilidad sobre la figura presidencial y de la vida diaria de las y los chilenos a través de este modelo que Piñera perpetúa”, señaló.

Sobre los anuncios, la dirigenta Progresista señaló: “Cuando Piñera reduce el número de parlamentarios no lo hace por austeridad, sabemos que no es su fuerte, sino que porque le tiene pánico a la diversidad. Extraña ese parlamento en el que todos se parecían más a él, su familia y amigos. Finalmente, lo único que se cumplirá de la Cuenta Presidencial será el eclipse solar. Todo el resto viene con letra chica”.

El diputado y presidente del PC, Guillermo Tellier, explicó que “me pareció que fue un discurso bastante populista y demagógico, vuelve a las andanzas de una batería de promesas que es imposible cumplir en lo que le queda de gobierno. Las políticas se van a concretar desde el año 2026. Él está haciendo promesas que tendrían que hacer otros gobiernos”.

Además, el timonel comunista agregó que “estamos dispuestos a limitar la reelección sin letra chica, pero la reducción no, porque nos va a llevar indudablemente al sistema binominal de vuelta. Nosotros queremos más democracia, reducir el parlamento significa atentar contra la democracia y la diversidad”.

Por su parte, el presidente FREVS y diputado, Jaime Mulet, sostuvo que “en términos regionalistas, Anunció unos proyectos de tren o un metro que, eventualmente, se podría construir en Concepción en el futuro y otros voladores de luces”, dijo y agregó que “lo que falta es la ley de rentas regionales. Que es el tercer pie de la reforma de descentralización, y no anunció absolutamente nada. Al Presidente se le olvidan las regiones y ha quedado nuevamente en deuda”.