Los progresistas se felicitan del resultado de su trabajo que región por región poco a poco va dando frutos, ahora es la Región de Atacama que luego del trabajo para reunir las firmas, el Partido Progresista se convierte es una organización con todas las de la ley.
En medio de una nueva gira esta vez por el norte del país, en que Marco Enríquez-Ominami, recorrió Antofagasta, Calama, San Pedro y Tocopilla
Los progresistas se felicitan del resultado de su trabajo que región por región poco a poco va dando frutos, ahora es la Región de Atacama que luego del trabajo para reunir las firmas, el Partido Progresista se convierte es una organización con todas las de la ley.
En medio de una nueva gira esta vez por el norte del país, en que Marco Enríquez-Ominami, recorrió Antofagasta, Calama, San Pedro y Tocopilla, el líder de los progresistas enfatizó: “el movimiento progresista crece y crece, llegó para cambiar la política, terminar con la colusión de las farmacias y de los partidos políticos”.
Se reunió en cada ciudad del norte con organizaciones sociales y desde allí saludo a los dirigentes y militantes progresistas de la Región de Atacama, “la legalización de una nueva región es la expresión de que esta fuerza será una alternativa real al duopolio”.
Los progresistas en Atacama se legalizan entre cosas, dijo el máximo dirigente del Movimiento, “para comprometerse a que nunca más los partidos tradicionales puedan frenar la ley antidiscriminación. En honor a Daniel Zamudio y a todos los discriminados, los progresistas renuevan su compromiso con la tolerancia”.
Ante organizaciones sociales de Tocopilla, Enríquez-Ominami aprovechó la ocasión para referirse a la ausencia de un programa político en la Concertación, “denunciamos al duopolio político imperante y particularmente a la Concertación por manipular al país, mantiene sólo el eslogan cuya prioridad como tarea del momento es sacar a Piñera y a la derecha del gobierno pero sin propuesta de programa”.
Con la legalización de los progresistas en la Región de Atacama ya suman ocho las regiones en que el Partido Progresista está legalmente constituido.