Esta tarde, la Directiva Nacional del Partido Progresista se pronunció respecto a la decisión del Juez del Octavo Juzgado de Garantía, Juan Manuel Escobar, de dejar en prisión preventiva a los imputados del denominado “Caso Penta”, Carlos Eugenio Lavín, Carlos Alberto Délano, Hugo Bravo, Pablo Wagner, Iván Álvarez y Marcos Castro.
Al respecto, la Presidenta del PRO, Patricia Morales, señaló que “Si bien es una medida preventiva, nos parece una señal muy importante para la ciudadanía, ya que se termina con la escandalosa impunidad que suele existir en materia de delitos financieros o corrupción, más aún cuando involucran a la clase política”. A su vez, señaló que “Por lo mismo, creo que aquellos que reconocieron haber cometido irregularidades en el financiamiento de sus campañas, deben renunciar de inmediato a sus cargos partidarios. Es una señal de mínima decencia que se le debe exigir a cualquier parlamentario”.
Por su parte, el Presidente de Fundación Progresa y líder del Partido Progresista, Marco Enríquez-Ominami, señaló que “El poder judicial está actuando, ahora falta que actúe la clase política. La ética debe inspirar la política, no solo la ley”. A su vez, agregó que “Es hora de regresar a la ética de la convicción y responsabilidad. La corrupción no puede quedar impune, porque se instala la gravísima percepción de que la justicia no es la misma para todos”.
Por último, la Vicepresidenta del PRO, Andrea Condemarín, señaló que “Hoy se demostró una voluntad de la ciudadanía, de los fiscales, de las instituciones y de los jueces por castigar los delitos, sólo falta que las leyes apoyen esta voluntad. Las penas de Cárcel tienen que estar a la altura de lo que la ciudadanía espera, y para ello se necesita voluntad política. Nosotros estamos disponibles para iniciar este debate y empujar las transformaciones que necesitamos en nuestro país”.